ENTRE ESPARTALES Y OLIVARES
El
pueblo enmudece entero
bajo su
manto estrellado
y los grillos se hacen eco
plácido y acompasado
duermen los niños y sueñan
que los reyes sean buenos
los mozuelos y mozuelas
con el amor de sus sueños
y los adultos soñamos,
que otro
invierno nos espera
con ilusión lo esperamos
igual que a la Nochebuena
y soñamos con la cosecha
que el
olivar nos promete
como
fruto de la tierra
que nos cobija y mantiene
y este pueblo Alicunero
se presta con humildad
con entrega y con esmero
para que sea ejemplar
el tesón de nuestro esfuerzo
sabiendo saber estar
sin que nadie nos dé clase,
de eso tenemos, para regalar
porque en esta tierra nace
de raíces que dejaron
tantas experiencias sabias
que sufrieron y lucharon
haciendo
escuela y patria
sembrando la madurez
generosa y solidaria
del hombre y de la mujer
que desde chico se mama
enterrando la simiente
que nuestro sudor cultiva
por nosotros y nuestra gente
por darle a las raíces vida
de una savia diferente
para que reluzca un pueblo
que las emigraciones no rompieron
ni lo dejaron desierto,
porque otros lo defendieron
con sangre sudor y esfuerzo
llora el viento en las retamas
con el quejido de su brío
por todos los que marchan
dejando un ciclo cumplido
que han defendido con el alma.
y tiene su cuna en la tierra
todo el ser que se la gana
con el tesón y la entereza
en defenderla y amarla.