Un Domingo de Ramos, con seres que están en el recuerdo y en el afecto.

(19 de Abril de 1965)

LA DEVOCIÓN DE UN PUEBLO POR SUS TRADICIONES NO SE DETIENE EN EL TIEMPO:
Lo primero que se nos viene a la memoria al ver esta fotografía nos es otra cosa que pensar en el tiempo trascurrido, pero la admiración por ella es superior y más si cabe teniendo en cuanta con el tesón y fe que participábamos la mayoría del pueblo volcados con nuestras obligaciones, que no era otra cosa que participar activamente para y con nuestras tradiciones.
Bien en este sentido cabría hacer mención de la unión que teníamos...