Lorenzo, es mi gran compañero de “partida” entre otros, el ha tenido y tiene una gran paciencia en enseñarme, cosa que como siempre le digo, no lo conseguirá, porque es muy difícil aprender de mayor, pero disfruto jugando con ellos. Hay cosas que no enseñan ni la cultura, ni los libros, que es la
amistad colectiva
fruto de tratarse con la diversidad de seres
y caracteres, donde es imprescindible solo una cosa: ser persona.