EL VALLE DE LA ANGOSTURA ALICUNERA
Su Majestad, el Olivo, contorna y nutre de colorido y adorno a un paisaje, que las laderas y demás componentes naturales conforman un valle peculiar y hermoso. Cuando al olivar se le doblan sus ramas abarrotadas de aceituna preñada de oro líquido, con el otoño avanzado, se aproxima la campaña de su recogida y la cosecha del aceite puro de oliva, manjar ilustre y medicina para el ser humano. Y este valle, por su situación geográfica, temperaturas altas o situaciones atmosféricas especiales, saca el mejor rendimiento y la mejor calidad de toda Andalucía, que al mismo tiempo cosecha, ese aceite que todo el mundo lo demanda. El Valle observado desde fuera, de cualquier viso o atalaya, no muestra la realidad de su contenido, como cuando nos adentramos en sus entrañas, es un placer pasear por cualquiera de sus caminos rurales.
Su Majestad, el Olivo, contorna y nutre de colorido y adorno a un paisaje, que las laderas y demás componentes naturales conforman un valle peculiar y hermoso. Cuando al olivar se le doblan sus ramas abarrotadas de aceituna preñada de oro líquido, con el otoño avanzado, se aproxima la campaña de su recogida y la cosecha del aceite puro de oliva, manjar ilustre y medicina para el ser humano. Y este valle, por su situación geográfica, temperaturas altas o situaciones atmosféricas especiales, saca el mejor rendimiento y la mejor calidad de toda Andalucía, que al mismo tiempo cosecha, ese aceite que todo el mundo lo demanda. El Valle observado desde fuera, de cualquier viso o atalaya, no muestra la realidad de su contenido, como cuando nos adentramos en sus entrañas, es un placer pasear por cualquiera de sus caminos rurales.