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ALICUN DE ORTEGA: VIRGEN DE FÁTIMA...

VIRGEN DE FÁTIMA

Bella Virgen venerada
por generaciones alicuneras
en este valle de Granada
entre montes y laderas

por sus mujeres y hombres
que con devoción la llevan
entre manojos flores
por la campiña y la vega,

al redoble de campanas
van las carrozas bonitas
de hábiles manos bordadas
con una belleza infinita,

y en cuevas de Juan y Pedro
a nuestra Virgen guapa
le hacen altar y aposento
con sentimientos del alma

lágrimas sobre la aurora
brotan de ojos dolidos
de corazones que lloran
por aquellos que se han ido
y desde el Cielo la adoran

y estas casas y estas cuevas
expresando humildad devota
con la mejor de sus maneras
le rinden honores de gloria

y este pueblo alicunero
mostrando pasión externa
entre este valle y el Cielo
canta a la Virgen y le reza

cada cual lleva en su ser
su corazón y su presencia,
su religión y su fe,
su devoción y conciencia

con sus manos endurecidas
por lo que exige la tierra
tareas, sudores y fatigas
defendiéndola y queriéndola

con ese amor a la Virgen
que cada cual, a su manera
lo engulle y lo transmite
desde su ternura interna,

y este Cerro, con su Santo
embelesado en el tiempo,
le hace honor, contemplando
a la Virgen, en su trayecto.

Haciendo historia y pueblo
tomaremos una copa
fraternizando el ejemplo
de la convivencia honda

de un pueblo de sentimientos
y de amores arraigados
de pasiones y de afectos
que esta tierra nos ha dado

porque la llevamos dentro
porque la hemos sembrado
y porque nos da el sustento
fruto de nuestro trabajo

con nuestro esfuerzo y aliento
nuestra fe y amor al prójimo
y el querer a nuestro pueblo
con un sentimiento sólido

¿quién le puede dar lecciones
al valor de nuestro credo,
hospitalario y ameno,
solidario en sus acciones,
afectivo y sereno?

Y siempre amando a la vida
con fuerte y sagrado apego
a la actitud decidida
de la vergüenza y el respeto

y brindamos por la gloria
de los que nos han dejado
por su clase y su memoria
y su cariño mostrado

por esta Virgen de Fátima
que siempre será de nosotros
de nuestra fe y esperanza
y nuestros desvelos propios

por este Valle alicunero
y la pasión de sus seres
y del amor verdadero
de sus hombres y mujeres

por el Corazón de Jesús
que bendice a nuestro Pueblo
con espíritu andaluz
desde lo alto del Cerro.