¡VIVA SAN ROQUE!
Patrón del pueblo Alicunero
con muchos años de historia
venerado por el pueblo
en la bondad llana y honda.
En ambiente de humildad
de nuevo llega la Fiesta
de paz y fraternidad
del trasnoche y de la siesta
del querer a los amigos
que nos llegan desde fuera
y los familiares queridos
que con ansiedad se esperan
que vienen al paraíso
al que su mente recuerda
de estos lares sin olvido
en las raíces de la tierra
de plácidas noches al “fresco”
dónde nos daban la tantas
en un mundo más ameno
tan rico, sin tener nada
recuerdos, ¡hay! que recuerdos
que estas calles nos deparan
y los llevamos inmersos
por dentro de las entrañas.
Cada ser lleva en su equipaje
archivado en su memoria
los lazos de su linaje
como senderos de gloria
no hay riqueza más hermosa
que la que dicta el corazón
con la ternura preciosa
del amor y la pasión
que hay en las pequeñas cosas.
¡Ay! mi calle y mi casa
¡ay! de los tiempos que pasan
de una familia amada
y de tanto querer cargada.
Ven mis ojos en la distancia
a los seres de mi alma
cuántas fiestas disfrutamos
con la alegría a raudales
y tiempos ilusionados
en familia y amistades.
Y una vez más es la Fiesta
una de tantas que vienen
con nuestra ilusión abierta
a la gente y al ambiente
ofreciendo hospitalidad
generosidad y esmero
valores que vienen de atrás
llenos de comportamiento.
Las noches se visten de gala
en este valle de solera
adornadas y estrelladas
bajo el Santo centinela
dando ejemplo de humildad
este pueblo luce encanto
con clase de saber estar
ofreciendo un ambiente sano
dedicándole un recuerdo
aquellos que no se olvidan
que hicieron fiesta de pueblo
dándole amor y vida.
Cundo sacamos a San Roque
sentimos llanto en las venas
de la sangre que nos corre
de los pies a la cabeza
y cuando lo despedimos
le rogamos por la Fiesta,
por la familia y los amigos
por la paz y por la tierra
con un ¡viva de corazón!
y nuestra fe más sincera
que viva nuestro Patrón
y viva Alicún de Ortega.
Antonio.
Patrón del pueblo Alicunero
con muchos años de historia
venerado por el pueblo
en la bondad llana y honda.
En ambiente de humildad
de nuevo llega la Fiesta
de paz y fraternidad
del trasnoche y de la siesta
del querer a los amigos
que nos llegan desde fuera
y los familiares queridos
que con ansiedad se esperan
que vienen al paraíso
al que su mente recuerda
de estos lares sin olvido
en las raíces de la tierra
de plácidas noches al “fresco”
dónde nos daban la tantas
en un mundo más ameno
tan rico, sin tener nada
recuerdos, ¡hay! que recuerdos
que estas calles nos deparan
y los llevamos inmersos
por dentro de las entrañas.
Cada ser lleva en su equipaje
archivado en su memoria
los lazos de su linaje
como senderos de gloria
no hay riqueza más hermosa
que la que dicta el corazón
con la ternura preciosa
del amor y la pasión
que hay en las pequeñas cosas.
¡Ay! mi calle y mi casa
¡ay! de los tiempos que pasan
de una familia amada
y de tanto querer cargada.
Ven mis ojos en la distancia
a los seres de mi alma
cuántas fiestas disfrutamos
con la alegría a raudales
y tiempos ilusionados
en familia y amistades.
Y una vez más es la Fiesta
una de tantas que vienen
con nuestra ilusión abierta
a la gente y al ambiente
ofreciendo hospitalidad
generosidad y esmero
valores que vienen de atrás
llenos de comportamiento.
Las noches se visten de gala
en este valle de solera
adornadas y estrelladas
bajo el Santo centinela
dando ejemplo de humildad
este pueblo luce encanto
con clase de saber estar
ofreciendo un ambiente sano
dedicándole un recuerdo
aquellos que no se olvidan
que hicieron fiesta de pueblo
dándole amor y vida.
Cundo sacamos a San Roque
sentimos llanto en las venas
de la sangre que nos corre
de los pies a la cabeza
y cuando lo despedimos
le rogamos por la Fiesta,
por la familia y los amigos
por la paz y por la tierra
con un ¡viva de corazón!
y nuestra fe más sincera
que viva nuestro Patrón
y viva Alicún de Ortega.
Antonio.