SOBRE LOS TÍTULOS DE PRÍNCIPE DE ASTURIAS, PRÍNCIPE DE GERONA Y DUQUE DE MONTBLANC.........
Buenos días amigos y amigas... intervinientes del Foro.
Con vuestro permiso, claro está, quisiera hacer una breve reseña histórica sobre los títulos dinásticos y nobiliarios mencionados en mi encabezamiento, solamente lo hago a título histórico, sin ánimo de crear polémica sobre cualquier ideología política.
Una vez dicho esto, entremos en materia: el título de Príncipe de Asturias, con el que se reconoce al heredero de la corona española, fue hasta el siglo XVI el nombre oficial del futuro rey de Castilla y León. El título se remonta al año 1.388, en que fue dado por primera vez, y conjuntamente, al infante don Enrique, hijo mayor de Juan I (1,379-1.390), y a su esposa doña Catalina de Lancáster, nieta de Eduardo III de Inglaterra (1,327-1.377) y de Pedro I el Cruel (1.350-1.369).
Esta costumbre de reservar un título, con los derechos anejos, al presunto heredero de la corona se introdujo también en los Estados orientales de la Península, aproximadamente por las mismas fechas.
Durante los siglos XIII y XIV, al heredero de los reinos de Aragón y Valencia y del condado de Barcelona (declarados inseparables por Jaime II en las Cortes de Tarragona de 1.319) se le jura solo como " primogénito y legítimo sucesor ". Esto conllevaba además, el cargo de gobernador o procurador general del reino, así como hacer las veces del rey en ausencia de este.
De todos los amantes de la historia es conocida la convulsión dinástica hereditaria en el reino de Aragón, durante los últimos años del siglo XIV y primeros del siglo XV. Resuelto el problema sucesorio con la elección del infante don Fernando de Trastámara (llamado el de Antequera), hermano de Enrique III de Castilla y de León, se coronó al nuevo rey en las Cortes de Zaragoza de 1.414.
Según crónicas de la época, estando en la fiesta de la coronación de Fernando I de Antequera o de Aragón, llegó su hijo el infante Don Alfonso (el futuro Alfonso V el Magnánimo), se le vistió por el rey, su padre, con un manto y le puso un chapeo en la cabeza y una vara de oro en la mano, " y diole la paz, y el título de Príncipe de Gerona, haciendo constar que desde esta otorgación, el primogénito y sucesor del Reino de Aragón y Valencia y del Condado de Barcelona, ostentaría el título de Príncipe de Gerona, así como le dió en testamento el titulo de Duque de Montblanc, de igual modo que el heredero del reino de Castilla y León, ostentaba el título de Príncipe de Asturias ".
He de decir, dando un salto cuantitativo, que el infante Don Juan, hijo de los Reyes Católicos, fue jurado por un lado como Príncipe de Asturias y por otro como Príncipe de Gerona, etc, etc... Esta formula fue simplificada por Felipe II a la hora de proclamar heredero a su hijo, el futuro Felipe III.
Ni que decir tiene, que estos títulos, mas el de Príncipe de Viana, los ostenta la heredera de la corona española, la Princesa de Asturias.... Leonor de Borbón. (Y he aquí la paradoja... este que escribe, católico y republicano hasta la médula, hablando del como y porqué de estos títulos, por el mero hecho de haber leído algo sobre los mismos, en este Foro.
Desde Alicún... un saludo.
Buenos días amigos y amigas... intervinientes del Foro.
Con vuestro permiso, claro está, quisiera hacer una breve reseña histórica sobre los títulos dinásticos y nobiliarios mencionados en mi encabezamiento, solamente lo hago a título histórico, sin ánimo de crear polémica sobre cualquier ideología política.
Una vez dicho esto, entremos en materia: el título de Príncipe de Asturias, con el que se reconoce al heredero de la corona española, fue hasta el siglo XVI el nombre oficial del futuro rey de Castilla y León. El título se remonta al año 1.388, en que fue dado por primera vez, y conjuntamente, al infante don Enrique, hijo mayor de Juan I (1,379-1.390), y a su esposa doña Catalina de Lancáster, nieta de Eduardo III de Inglaterra (1,327-1.377) y de Pedro I el Cruel (1.350-1.369).
Esta costumbre de reservar un título, con los derechos anejos, al presunto heredero de la corona se introdujo también en los Estados orientales de la Península, aproximadamente por las mismas fechas.
Durante los siglos XIII y XIV, al heredero de los reinos de Aragón y Valencia y del condado de Barcelona (declarados inseparables por Jaime II en las Cortes de Tarragona de 1.319) se le jura solo como " primogénito y legítimo sucesor ". Esto conllevaba además, el cargo de gobernador o procurador general del reino, así como hacer las veces del rey en ausencia de este.
De todos los amantes de la historia es conocida la convulsión dinástica hereditaria en el reino de Aragón, durante los últimos años del siglo XIV y primeros del siglo XV. Resuelto el problema sucesorio con la elección del infante don Fernando de Trastámara (llamado el de Antequera), hermano de Enrique III de Castilla y de León, se coronó al nuevo rey en las Cortes de Zaragoza de 1.414.
Según crónicas de la época, estando en la fiesta de la coronación de Fernando I de Antequera o de Aragón, llegó su hijo el infante Don Alfonso (el futuro Alfonso V el Magnánimo), se le vistió por el rey, su padre, con un manto y le puso un chapeo en la cabeza y una vara de oro en la mano, " y diole la paz, y el título de Príncipe de Gerona, haciendo constar que desde esta otorgación, el primogénito y sucesor del Reino de Aragón y Valencia y del Condado de Barcelona, ostentaría el título de Príncipe de Gerona, así como le dió en testamento el titulo de Duque de Montblanc, de igual modo que el heredero del reino de Castilla y León, ostentaba el título de Príncipe de Asturias ".
He de decir, dando un salto cuantitativo, que el infante Don Juan, hijo de los Reyes Católicos, fue jurado por un lado como Príncipe de Asturias y por otro como Príncipe de Gerona, etc, etc... Esta formula fue simplificada por Felipe II a la hora de proclamar heredero a su hijo, el futuro Felipe III.
Ni que decir tiene, que estos títulos, mas el de Príncipe de Viana, los ostenta la heredera de la corona española, la Princesa de Asturias.... Leonor de Borbón. (Y he aquí la paradoja... este que escribe, católico y republicano hasta la médula, hablando del como y porqué de estos títulos, por el mero hecho de haber leído algo sobre los mismos, en este Foro.
Desde Alicún... un saludo.