Un escocés va al banco a cobrar un cheque en ventanilla. El empleado, antes de darle el electivo, le pregunta:
- ¿Cómo quiere los billetes?
- ¿Cómo los quiero? ¡Con toda mi alma!
- ¿Cómo quiere los billetes?
- ¿Cómo los quiero? ¡Con toda mi alma!