Un día caminaba un señor por uno de los pasillos del Hospital Psiquiátrico con el doctor de turno. Mientras caminaba, ve a un hombre en una silla de ruedas muy melancólico y desolado que lloraba afanadamente y se quejaba exclamando una y otra vez: " ¡Ay Loló!, ¡por qué me dejaste Loló!"
Entonces el señor le pregunta al doctor:
"Doctor ¿y a ese hombre qué le pasó?"
"Fíjese usted que ese señor se iba a casar, ya tenía todo lo de la boda listo y planeado y justo en el momento de la boda, la novia no apareció y lo dejó plantado. Desde ese día ha estado así."
Siguen caminando el señor y el doctor. Más adelante pasan por otro de los pasillos y ve el señor que va con el doctor a un hombre con camisa de fuerza que se pegaba una y otra vez contra la pared, entonces el señor le pregunta al doctor:
"Doctor ¿y a ese qué le pasó?"
" ¡Ah no, pues ese fue el que se casó con Loló!"
Entonces el señor le pregunta al doctor:
"Doctor ¿y a ese hombre qué le pasó?"
"Fíjese usted que ese señor se iba a casar, ya tenía todo lo de la boda listo y planeado y justo en el momento de la boda, la novia no apareció y lo dejó plantado. Desde ese día ha estado así."
Siguen caminando el señor y el doctor. Más adelante pasan por otro de los pasillos y ve el señor que va con el doctor a un hombre con camisa de fuerza que se pegaba una y otra vez contra la pared, entonces el señor le pregunta al doctor:
"Doctor ¿y a ese qué le pasó?"
" ¡Ah no, pues ese fue el que se casó con Loló!"