Aunque pequeña, estaba si entrabas por la puerta lateral, a la derecha, una pequeña vitrina acristalada, era la que libros sacaba, hoy la biblioteca es mi casa, la gente se asombra, incluso los que muchos libros, música y películas tienen. Don Leo, que ha estado aquí hace un par de semanas, una visita muy, pero que muy grata, se hizo cruces y dijo- Y, yo me asusto de tener tanto libro, música, aquí sí que hay tela-, aún nos faltan cajas por abrir, solo nos quedan unos tres metros del pasillo por poner otro estante, Ikea, y a montar y colocar. Benditos los libros, no todos, quieren, pasar por la universidad, si aprender un oficio, bien, con el correspondiente titulo, mas no solo de hablar de sus oficios viven los hombres, este debe estar educado integralmente, son tanto lo que nos enseñan los libros, lo que nos enriquecen, que aquel o aquella que los desprecie, no sabe muy bien lo que se pierde ¡Y saber que los hay que se jactan de no haber leído un libro en su vida! Y, no son, ancianos, estos, que no tuvieron las mismas facilidades, hoy se curten, les hace estar mejor, el aprendizaje; de los que hablo son de hoy…Se les nota, tontos inútiles, al menos si fueran mínimamente discretos, teniendo hijos …menudo ejemplo ¡La vida es así! Todo lo arreglan con el coche elegante, la corbata y algún que otro digamos deporte, eventos varios, menos trabajar la mente. El dinero les embrutece, hasta llegar a ser monstruos ¡A la biblioteca majos, gran idea!
ABRAZOS.
ABRAZOS.