Fuí conductor del
coche de línea en ese maravilloso
pueblo en los años 60, con la empresa Gómez-Urbano; En este pueblo pasé los tres mejores años de mi vida.Me casé y ahí nació mi primer hijo. Tambien me tomé algunos tintos en el
bar de M.Rebolondo y en el Chato Piri, donde me trataron muy bien, por esto, tengo un gran recuerdo de este gran pueblo.En mas de una ocasion, os llevé a las
cuevas de Nerja y a la
playa. Un abrazo para todos. Juan Aguayo.