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Blanca, ya mismo estará en el Policar, recuerdo que veraneaban allí. Con quien tengo contacto es con Don Leo, cada día me encuentro sus buenos días, hará un año, que estuvo aquí, si viene su hermana, no se puede ir, sin venir a ver qué tal estoy, le tomamos cariño y él a nosotros, bautizo a tres de nuestros cuatro hijos, el primero, Miguel Ángel, lo bautizo un sacerdote amigo de mi Mat, está bautizado en la ermita de la jet La Bona Nova, lo quería mucho y se ofreció a bautizarlo él, la segunda en el Sagrario y el tercero también, la cuarta en la Estación, donde nos unimos eternamente, yo, la mujer, me fui con él, quedó la madre, todos son licenciados universitarios, así queríamos que fueran y demostraron tener cerebro, y hasta Gracias a Dios tienen trabajo. El mayor, no se cansa de estudiar, él, su padre, empezó la carrera, pero la codicia de un “médico” que con pagar unos € a un MIR qué muera un hombre que llegó a ser el más feliz, fuimos los más felices del universo, a quien más amo, hay otra vida, él no se separa de mí, me ayudo a salir adelante, sola, siempre con él, eternamente juntos estaremos, sin dudar ni un solo instante. Amar, el más hermoso de los sentimientos. Ama a tú prójimo como a ti mismo. Sólo la verdad os hará libres. Hablo poco, nos dio el mejor de los ejemplos. Amar, aprender, cuanto más mejor, así nadie os humillará. Pero en este país se lee tan poco, tengo más libros en nuestra casa más que en muchas librerías, los clásicos incluso repetidos, yo los compré con un continente pobre, después Miguel Ángel, en edición de lujo, 200 metros cuadrados, por 2,46 de alto. Más el último montón que encima de mi cama tengo, con lo hermosos que son los libros, lo que cada día nos enseñan, a ser LIBRES. Abrazos. Teresa