En otros tiempos existia un manantial con abundante
agua que servia de
abrevadero a todo el "
Campo de abajo´", en la actualidad dicho manantial se ha visto resentido por las constantes explotaciones de regadios industriales, que ha contribuido a que este manantial casi se agote. Mi impotencia es máxima debido a que ni el Ministerio de Medio Ambiente, ni la Conserjeria de la Junta de
Andalucia, hagan nada al respecto. Los que queremos esta tierra ya que hemos nacido allí nos tenemos que resignar a observar como se queda este entrañable cortijo como el desierto del Sahara.