Me acuerdo cuando nos llevaron ahí a muchos niños y no se me ocurrió otra cosa que volverme a Cogollos, nadie se dió cuenta, y cuando notaron mi falta me buscaron por los alrededores de la casa del forestal hasta que llegaron al pueblo y yo, que me había refugiado debajo de la mesa camilla de la casa de mi abuela donde tampoco se dieron cuenta de mi llegada, iba escuchando todos los comentarios, sobre mi pérdida, de las personas que se acercaban a la mesa. Al final salí del escondite y todos sentimos... Esta foto me recuerda los paseos que dabamos algunos viernes con los maestros del colegio, sin previo aviso, ni agua ni merienda, que fuertes eramos.
Me acuerdo de mis compañeros con los que hoy en día con la mayoría tengo contacto y nos llevamos bien, siempre que nos vemos nos da mucha alegria, . Que bonita es la casa del forestal eh que fiestas aquellas.