Lo del nombre de la plaza, una nueva cacicada, osea, eso de que aquí se hace lo que yo digo. Y eso que la gente del pueblo tan sólo pedía lo mas lógico: el nombre de su patrón, San Antonio. Pero bueno, ya se sabe, el que no dá mas de sí...Pero lo del nombre es lo de menos. Lo peor es que cómo se puede construir una plaza y dejar sin aparcamientos al pueblo y sin que los coches y camiones puedan dar la vuelta. Eso es inaudito y deja a las claras el tipo de persona que tiene que ser el que gobierna. Pero a estos que se creen pequeños dioses en la tierra sólo decirles que mas dura será la caída, porque, no le quepa duda, tarde o temprano todos recibimos lo que nos merecemos.