EL VIENTO DE LA
RAMBLA DEL MOLINILLO
Con húmeda suavidad sopla el viento
Viene de la Rambla y de los
huertos,
que su sonar contagian mis oídos.
El silencio de la
noche, sabor a estío.
Con la frente como el mármol escuchas,
Insistente en los cristales holgados
Toca triste, llamando en su lastimero,
Como perdido, sin que nadie le haga caso.
Pero no es él, quién me desveló mi sueño
Sino otra fuerza, que arrastraba mi pensamiento
Desatando de mi ser, la cárcel del miedo,
Fue el viento
... (ver texto completo)