FREILA (Granada)

. Gastas menos que… Tutankhamon en mortadela.

# Gran trabajo tiene, quien comentar a todos quiere.

# Fray Prudencio nunca llegó a guardia de ningún convento; pero fray Osar pronto llegó a abad.

• Pide un ataúd con forma de lata de cerveza

Bill Bramanti se puso en contacto con una empresa de publicidad para que le confeccionara un ataúd con la forma y los colores de la latita de la cerveza Pabst Blue Ribbon. “Le gusta tanto su cerveza que decidió mandar a hacer un ataúd con la forma de la latita” explica orgullosa su hija.

-A ver, Jaimito, ¿qué me dices de la muerte de Napoleón?
-Que lo siento mucho, señorita.

Es injusto que una generación sea comprometida por la precedente. Hay que encontrar un medio que preserve a las venideras de la avaricia o inhabilidad de las presentes.
Napoleón I

Un marica va al medico y le dice que tiene un dolor pero que es muy timido y que le da vergüenza decir donde.
-A ver, te duele la cabeza?
-No, mas abajo.
-Te duele el pecho?
-No, mas abajo.
-Te duele la tripa?
-No, mas abajo.
-Ejem... te duele el pajarito?
-No, mas bien la jaulita.

El correo de hayer no lo pude abrir solo me salio en un lado y ponia fallo en la descarga

Me voy a la cocina, al guisoteo.
Luego vuelvo.

El correo de hayer no lo pude abrir solo me salio en un lado y ponia fallo en la descarga

Ya estoy aqui esto ha sido rapido.
Ahora te lo enviaré otra vez, por si hay mas suerte.

Tienes menos futuro que un vampiro mellado.

El correo de hayer no lo pude abrir solo me salio en un lado y ponia fallo en la descarga

Tienes menos futuro que un vampiro mellado.

Muy bien hasta luego

que te aproveche.
No comas rápido que luego te sienta mal.

y hablando de comer, me voy a ver si preparo algo que tengo hambre

El misterio de la casa matusita

Muchos que han visitado Lima y han llegado al centro de la ciudad, han pasado sin saberlo por uno de los lugares más terroríficos jamás vistos.

La leyenda urbana que se teje en torno a esta casa, narra la escalofriante historia de un empleador que fue muy cruel con sus empleados. Las oficinas de esta conocida tienda albergaba en su segundo piso, un cuarto grande, donde el dueño de la antigua casa emitía sus acostumbrados gritos a sus asustados sirvientes.

Cansados ... (ver texto completo)