Después de las adversidades viene la suerte.
No hay mal que por bien no venga.
No hay mal que cien años dure.
Lit: Cuando la desgracia llega a su colmo (extremo), viene la felicidad.
No hay mal que por bien no venga.
No hay mal que cien años dure.
Lit: Cuando la desgracia llega a su colmo (extremo), viene la felicidad.