Un método tradicional para cazar unicornios involucra la captura de una virgen. En uno de sus libros de notas, Leonardo Da Vinci escribió:
‘El unicornio, a pesar de su intemperancia y su falta de control, olvida su ferocidad por el amor a las hermosas doncellas; dejando de lado todo temor, se sientan a su lado y se duermen en sus regazos, y así los cazadores lo atrapan.'
‘El unicornio, a pesar de su intemperancia y su falta de control, olvida su ferocidad por el amor a las hermosas doncellas; dejando de lado todo temor, se sientan a su lado y se duermen en sus regazos, y así los cazadores lo atrapan.'