Andrómeda
Hija de Cefeo, rey de Etiopia, y de Casiopea. La joven princesa a punto estuvo de ser devorada por un monstruo marino a causa de la vanidad de Casiopea, su madre, quien declaró que ella eran más hermosas que la diosa Hera y las ninfas del mar, las Nereidas.
Perseo liberando a Andrómeda del monstruo marino
Perseo liberando a Andromeda.
Jacopo Palma il Giovane (1544-1626)
Las Nereidas se sintieron insultadas y se quejaron al dios del mar Poseidón.
Para castigar la osadia de Casiopea, Poseidon amenazó con mandar una inundación y a un monstruo marino para destruir al reino de Etiopía.
El oráculo aconsejó al rey sacrificar a su hija ya que era el único medio que se encontró para apaciguar la furia de los dioses y evitar la catástrofe.
Las nereidas, en consecuencia, ataron a Andrómeda sobre una roca. Justo en el instante anterior a ser devorada, apareció Perseo surcando el cielo gracias a unas sandalias mágicas y, uasando la cabeza de Medusa, a quien habia dado muerte, consiguió petrificar al monstruo.
Hija de Cefeo, rey de Etiopia, y de Casiopea. La joven princesa a punto estuvo de ser devorada por un monstruo marino a causa de la vanidad de Casiopea, su madre, quien declaró que ella eran más hermosas que la diosa Hera y las ninfas del mar, las Nereidas.
Perseo liberando a Andrómeda del monstruo marino
Perseo liberando a Andromeda.
Jacopo Palma il Giovane (1544-1626)
Las Nereidas se sintieron insultadas y se quejaron al dios del mar Poseidón.
Para castigar la osadia de Casiopea, Poseidon amenazó con mandar una inundación y a un monstruo marino para destruir al reino de Etiopía.
El oráculo aconsejó al rey sacrificar a su hija ya que era el único medio que se encontró para apaciguar la furia de los dioses y evitar la catástrofe.
Las nereidas, en consecuencia, ataron a Andrómeda sobre una roca. Justo en el instante anterior a ser devorada, apareció Perseo surcando el cielo gracias a unas sandalias mágicas y, uasando la cabeza de Medusa, a quien habia dado muerte, consiguió petrificar al monstruo.