Lorca Club de Fútbol
Al final de la temporada 1993-94, el CF Lorca Deportiva de Moreno Manzaneque juega en Preferente y tanto el Lorca Promesas como la Unión Deportiva Lorca soportan una fuerte deuda. Surgen las conversaciones a tres bandas y se consigue fusionar al Lorca Promesas con la UD Lorca en el Lorca CF, que se hizo cargo de las deudas (el CF Lorca Deportiva no deja ninguna deuda). El presidente de este nuevo club es José Reverte Navarro, ganadero, y el entrenador el lorquino Juan Martínez Casuco. El club milita la temporada 1994-95 en Tercera División en el grupo XIII. Termina la temporada campeón habiendo jugado 36 partidos (el resto jugó 35 por la retirada del Atlético Murcia). Se juega la liguilla de ascenso a Segunda División B contra Novelda, Tárrega CF y UD Poblense, aunque no logró el objetivo.[1] Sin embargo, el descenso del Cartagena FC a Tercera permitió el ascenso del Lorca CF a Segunda División B. El equipo quedó encuadrado en el grupo IV para la temporada 1995-96. El poco tiempo que hubo para preparar un equipo acorde a la categoría por la sorpresa del ascenso marcó la temporada, el Lorca CF quedó penúltimo y volvió a Tercera División. La temporada 1996-97 termina con el Lorca CF en segunda posición y de nuevo luchando por el ascenso contra CD Alcoyano, CD Manacor y Badaloní en el grupo C1[2] y con otro ascenso a la categoría de bronce en un partido histórico contra el Alcoyano[3] que finalizó con el resultado de 5 a 2 para el club de la ciudad del Sol. La temporada 1997-98 el fútbol lorquino vuelve a tener un equipo en Segunda División B, de nuevo en el grupo IV, entre otros junto a los murcianos del Yeclano CF, AD Mar Menor y Real Murcia. La campaña termina con un nuevo descenso, pero esta vez la permanencia estuvo más cerca que otras veces. La campaña 1998-99 comienza convulsa por la muerte de Julio César Cardozo, ex jugador paraguayo del Lorca Deportiva, en un accidente de tráfico cuando se dirigía a Lorca. De nuevo el Lorca CF cierra la temporada en posición de liguilla y lucha por el ascenso a Segunda División B, esta vez encuadrado en el grupo C1 con Manlleu, CD Alcoyano y Atlético Baleares.[4] De nuevo ascenso, dedicado por el entrenador Andrés Tébar a Cardozo, allá donde esté. La temporada 1999-00 un grupo inversor, con Javier Martín Mingarro en su representación, adquiere el Lorca "con el objetivo de llevarlo a Segunda División". Además, dicho grupo absorbe el déficit de 15.000.000 de pesetas que existía. El director deportivo, Santos Márquez, invirtió (siempre según él) 20.000.000 en jugadores (algunos brasileños de los que él sacaba tajada). El equipo no despertó demasiada confianza entre la afición. La temporada acaba con otro descenso, esta vez como colistas. De nuevo comienza una temporada, la 2000-01, con el objetivo del ascenso a Segunda División B. Como fichaje estrella se presenta Daniel Toribio Aquino, mítico jugador del Real Murcia. El Lorca CF acaba con 93 puntos en cuarta posición, que da derecho a jugar la liguilla de ascenso. Encuadrado en el grupo C1[5] junto a CE Europa, Alicante CF y Vilafranca CF, el Lorca queda segundo por detrás del Alicante y no consigue el ascenso. La última temporada del club, 2001-02, es la crónica de una autodestrucción anunciada. Finalizada la campaña anterior, los jugadores no cobran y se encierran en el estadio reclamando lo que se les debe. Santos Márquez, presidente, director deportivo y déspota, no aparece por la ciudad hasta julio, con toda la plantilla por hacer y con la mitad de los jugadores sin cobrar. El entrenador Quique Yagüe asegura que sólo entrenará si cobra la plantilla. La deuda pone en peligro también la continuidad del fútbol base, ya que se deben más de 3.000.000 de pesetas en desplazamientos. El equipo terminó en cuarta posición, con los jugadores sin cobrar cinco meses de sueldo, y con la prensa local exigiendo a Santos Márquez el cumplimiento de los contratos. De nuevo el Lorca CF juega por el ascenso en el grupo C1,[6] esta vez frente a Vilafranca CF, CF Gavà y CD Burriana. En el partido decisivo, Lorca - Vilafranca (para ascender el Lorca CF necesitava ganar y que el Gavà no ganara al Burriana), Santos Márquez no aparece para no pagar a nadie. El Lorca gana 4-0, pero el Gavà consigue la victoria y asciende. Finalizada la teporada se comienza a rumorear la desaparición. El club tiene una deuda de 240.000.000 millones de pesetas (1.202.024 €). A mediados de julio aparece un nuevo club en la ciudad, el Lorca Deportiva CF, presidido por Antonio Baños, que toma el escudo y los colores del antiguo Lorca Deportiva. Por su parte, el Lorca CF anuncia su presentación oficial para el 9 de agosto, si se pagara antes del 15 de agosto ningún jugador se iría, pero si no nadie se haría cargo de la deuda y desaparecería. Márquez no paga, el club desciende a Preferente y desaparece (su plaza es ocupada por el Lumbreras). Algunos jugadores del Lorca CF pasan al Lorca Deportiva, como Antonio Robles y Pedro Cazorla.
Al final de la temporada 1993-94, el CF Lorca Deportiva de Moreno Manzaneque juega en Preferente y tanto el Lorca Promesas como la Unión Deportiva Lorca soportan una fuerte deuda. Surgen las conversaciones a tres bandas y se consigue fusionar al Lorca Promesas con la UD Lorca en el Lorca CF, que se hizo cargo de las deudas (el CF Lorca Deportiva no deja ninguna deuda). El presidente de este nuevo club es José Reverte Navarro, ganadero, y el entrenador el lorquino Juan Martínez Casuco. El club milita la temporada 1994-95 en Tercera División en el grupo XIII. Termina la temporada campeón habiendo jugado 36 partidos (el resto jugó 35 por la retirada del Atlético Murcia). Se juega la liguilla de ascenso a Segunda División B contra Novelda, Tárrega CF y UD Poblense, aunque no logró el objetivo.[1] Sin embargo, el descenso del Cartagena FC a Tercera permitió el ascenso del Lorca CF a Segunda División B. El equipo quedó encuadrado en el grupo IV para la temporada 1995-96. El poco tiempo que hubo para preparar un equipo acorde a la categoría por la sorpresa del ascenso marcó la temporada, el Lorca CF quedó penúltimo y volvió a Tercera División. La temporada 1996-97 termina con el Lorca CF en segunda posición y de nuevo luchando por el ascenso contra CD Alcoyano, CD Manacor y Badaloní en el grupo C1[2] y con otro ascenso a la categoría de bronce en un partido histórico contra el Alcoyano[3] que finalizó con el resultado de 5 a 2 para el club de la ciudad del Sol. La temporada 1997-98 el fútbol lorquino vuelve a tener un equipo en Segunda División B, de nuevo en el grupo IV, entre otros junto a los murcianos del Yeclano CF, AD Mar Menor y Real Murcia. La campaña termina con un nuevo descenso, pero esta vez la permanencia estuvo más cerca que otras veces. La campaña 1998-99 comienza convulsa por la muerte de Julio César Cardozo, ex jugador paraguayo del Lorca Deportiva, en un accidente de tráfico cuando se dirigía a Lorca. De nuevo el Lorca CF cierra la temporada en posición de liguilla y lucha por el ascenso a Segunda División B, esta vez encuadrado en el grupo C1 con Manlleu, CD Alcoyano y Atlético Baleares.[4] De nuevo ascenso, dedicado por el entrenador Andrés Tébar a Cardozo, allá donde esté. La temporada 1999-00 un grupo inversor, con Javier Martín Mingarro en su representación, adquiere el Lorca "con el objetivo de llevarlo a Segunda División". Además, dicho grupo absorbe el déficit de 15.000.000 de pesetas que existía. El director deportivo, Santos Márquez, invirtió (siempre según él) 20.000.000 en jugadores (algunos brasileños de los que él sacaba tajada). El equipo no despertó demasiada confianza entre la afición. La temporada acaba con otro descenso, esta vez como colistas. De nuevo comienza una temporada, la 2000-01, con el objetivo del ascenso a Segunda División B. Como fichaje estrella se presenta Daniel Toribio Aquino, mítico jugador del Real Murcia. El Lorca CF acaba con 93 puntos en cuarta posición, que da derecho a jugar la liguilla de ascenso. Encuadrado en el grupo C1[5] junto a CE Europa, Alicante CF y Vilafranca CF, el Lorca queda segundo por detrás del Alicante y no consigue el ascenso. La última temporada del club, 2001-02, es la crónica de una autodestrucción anunciada. Finalizada la campaña anterior, los jugadores no cobran y se encierran en el estadio reclamando lo que se les debe. Santos Márquez, presidente, director deportivo y déspota, no aparece por la ciudad hasta julio, con toda la plantilla por hacer y con la mitad de los jugadores sin cobrar. El entrenador Quique Yagüe asegura que sólo entrenará si cobra la plantilla. La deuda pone en peligro también la continuidad del fútbol base, ya que se deben más de 3.000.000 de pesetas en desplazamientos. El equipo terminó en cuarta posición, con los jugadores sin cobrar cinco meses de sueldo, y con la prensa local exigiendo a Santos Márquez el cumplimiento de los contratos. De nuevo el Lorca CF juega por el ascenso en el grupo C1,[6] esta vez frente a Vilafranca CF, CF Gavà y CD Burriana. En el partido decisivo, Lorca - Vilafranca (para ascender el Lorca CF necesitava ganar y que el Gavà no ganara al Burriana), Santos Márquez no aparece para no pagar a nadie. El Lorca gana 4-0, pero el Gavà consigue la victoria y asciende. Finalizada la teporada se comienza a rumorear la desaparición. El club tiene una deuda de 240.000.000 millones de pesetas (1.202.024 €). A mediados de julio aparece un nuevo club en la ciudad, el Lorca Deportiva CF, presidido por Antonio Baños, que toma el escudo y los colores del antiguo Lorca Deportiva. Por su parte, el Lorca CF anuncia su presentación oficial para el 9 de agosto, si se pagara antes del 15 de agosto ningún jugador se iría, pero si no nadie se haría cargo de la deuda y desaparecería. Márquez no paga, el club desciende a Preferente y desaparece (su plaza es ocupada por el Lumbreras). Algunos jugadores del Lorca CF pasan al Lorca Deportiva, como Antonio Robles y Pedro Cazorla.