Unas monjas en el convento, vigilando al pintor que habia venido a pintar las paredes.
Se dan cuenta de que el hombre tiene el pantalon roto con un enorme agujero y se le veian las partes.
Las monjas desesperadas hablan entre ellas:
Ah, Dios mio, como se lo decimos!
Hay que decirselo de forma educada!
A una de las monjas se le ocurre una idea:
Ya está, se lo diremos cantando!
De acuerdo
Las monjas estudian la canción y empiezan a cantar:
Pintoooooor que estaaaaaas pintaaaaaaaaaando, tápate lo que estaaaaaaa colgaaaaaando.
A eso que el pintor responde:
Para decirmeeeeeeeee que me tape los cojoooooones no hacen faltaaaaaaaaa tantas
canciooooooooooones!
Se dan cuenta de que el hombre tiene el pantalon roto con un enorme agujero y se le veian las partes.
Las monjas desesperadas hablan entre ellas:
Ah, Dios mio, como se lo decimos!
Hay que decirselo de forma educada!
A una de las monjas se le ocurre una idea:
Ya está, se lo diremos cantando!
De acuerdo
Las monjas estudian la canción y empiezan a cantar:
Pintoooooor que estaaaaaas pintaaaaaaaaaando, tápate lo que estaaaaaaa colgaaaaaando.
A eso que el pintor responde:
Para decirmeeeeeeeee que me tape los cojoooooones no hacen faltaaaaaaaaa tantas
canciooooooooooones!