En un manicomio, el alcaide intenta divertirse con tres de los locos más locos de todos. En esto, que se presenta en su celda, y les dice:”A ver, locos, os voy a hacer una prueba para ver cómo lleváis la perola. Mira, os voy a pintar una puerta en la pared, y el primero que logre salir, pues eso, sale, y se va a su casa”. Los locos estaban entusiasmados. Llega el primer loco y… ¡zasssss!, se da contra la puerta. El alcaide se parte el culo. El segundo loco lo intenta también, y…. ¡zzzzaaaaasss!, se arrea otro topetazo. A su vez, el primer loco que lo había intentado seguía chocándose contra la pared, y así uno y otro. Pero el tercero seguía allí, sin levantarse de la litera, y meándose de la risa. En esto, que el alcaide se da cuenta y le pregunta:”Pero a ver, ¿tú por qué te ríes tanto?”. Y el loco se le acerca y le dice al oído:”Porque esos dos sí que están locos. ¿No se dan cuenta de que yo tengo la llave?”.