Al norte de Sierra Nevada, en las proximidades del límite del Parque Natural, se asienta Polícar. Su pasado morisco se evidencia en la configuración de su estructura urbana. Su patrimonio, sus estrechas callejas y su peculiar casco histórico son su principal atractivo. Destacan de su patrimonio la Iglesia Parroquial de San Antonio de Padua, la Ermita de San Antonio, así como sus casas que aún conservan en muchos casos las características que dieron originalidad al pueblo, como por ejemplo los aleros de madera.