Una reina de muchos amantes
Desde la perspectiva de los textos galeses y franceses más antiguos, la historia es algo más compleja. Aparentemente, ella habría tenido otros amantes antes que Lanzarote (personaje introducido tardíamente en el esquema primitivo de la leyenda). En este sentido, Ginebra es comparable a la reina Medbh de Conaught, que tenía amores con los guerreros de los cuales su reino dependía. En la lista de amantes estaban: Edern, Kai, Meleagant y Mordret.
Ginebra representa pues, la Soberanía, de modo tal que como prostituta sagrada dispone de su soberanía confiándose a los guerreros que velan por tal. Ya que son ellos y no otros los que realizan las hazañas necesarias en nombre del reino que la Ginebra encarna y simboliza.
En otros textos, de origen insular, se reflejan tres imágenes diferentes de Ginebra, con las que Arturo se habría casado sucesivamente. La tercera, tendría el aspecto de una vieja anciana que Arturo transformaría en una mujer bella para poder vencer la repugnacia que le producía la obligación de besarla. Es este un tema corriente de las leyendas irlandesas a propósito de la designación del rey, el cual debe optar por la Soberanía, más allá de las apariencias.
Desde la perspectiva de los textos galeses y franceses más antiguos, la historia es algo más compleja. Aparentemente, ella habría tenido otros amantes antes que Lanzarote (personaje introducido tardíamente en el esquema primitivo de la leyenda). En este sentido, Ginebra es comparable a la reina Medbh de Conaught, que tenía amores con los guerreros de los cuales su reino dependía. En la lista de amantes estaban: Edern, Kai, Meleagant y Mordret.
Ginebra representa pues, la Soberanía, de modo tal que como prostituta sagrada dispone de su soberanía confiándose a los guerreros que velan por tal. Ya que son ellos y no otros los que realizan las hazañas necesarias en nombre del reino que la Ginebra encarna y simboliza.
En otros textos, de origen insular, se reflejan tres imágenes diferentes de Ginebra, con las que Arturo se habría casado sucesivamente. La tercera, tendría el aspecto de una vieja anciana que Arturo transformaría en una mujer bella para poder vencer la repugnacia que le producía la obligación de besarla. Es este un tema corriente de las leyendas irlandesas a propósito de la designación del rey, el cual debe optar por la Soberanía, más allá de las apariencias.