Casandra
Casandra, hija de los reyes de Troya Hécuba y Príamo, era sacerdotiza de Apolo, con quien había pactado, a cambio de un encuentro carnal, recibir el don de la profecía.
Sucedió que cuando Casandra obtuvo la facultad de la adivinación, faltó a la promesa de acceder a los favores sexuales solicitados por Apolo, quien sintiéndose traicionado decidió castigarla, sin quitarle su don pero transformando este en una condena: Casandra podría ver el futuro pero nadie creería en sus pronósticos. Así, cuando anunció la caída de Troya, nadie tomo en serio su vaticinio.
Casandra, hija de los reyes de Troya Hécuba y Príamo, era sacerdotiza de Apolo, con quien había pactado, a cambio de un encuentro carnal, recibir el don de la profecía.
Sucedió que cuando Casandra obtuvo la facultad de la adivinación, faltó a la promesa de acceder a los favores sexuales solicitados por Apolo, quien sintiéndose traicionado decidió castigarla, sin quitarle su don pero transformando este en una condena: Casandra podría ver el futuro pero nadie creería en sus pronósticos. Así, cuando anunció la caída de Troya, nadie tomo en serio su vaticinio.