En la
boda
En pleno bodorrio, un infiltrado gorrón se acerca a uno de los invitados y le dice:
- ¿Te has fijado en lo fea que es la novia? Pobre muchacho, lo que tendrá que aguantar...
- Pero bueno, ¿cómo dices eso? ¡Es mi hija!
- ¡Uy! Perdona..., no creí que fueras su padre...
- Es que no soy su padre, soy su madre.