Una pareja se encuentra a varios kilómetros de la ciudad. Están dentro de un
coche y empiezan a tocarse. Cuando las cosas están al rojo vivo, la mujer le advierte:
'Mira, guapo, resulta que soy prostituta y el polvo te va a costar 10 mil pesetas'.
El tío, que ya no puede aguantar el calentón, acepta. Después del polvo ella le pide:
' ¿Por qué no me llevas a la ciudad a tomar algo?'
'Mira, bonita, resulta que soy taxista y la carrera hasta la ciudad te costará 20 mil pesetas'