Para que el verano sea un éxito rotundo, no pueden faltar en tu jardín estas alegres plantas: los girasoles son el buen humor en persona, si hablamos de plantas, claro está.
La elección es tuya: gigantes o enanos, en amarillo o en rojo, de maceta o de plena tierra … el surtido de girasoles es más extenso que nunca. No sólo en jardines rurales es una planta muy bien vista, aunque para estos casos se prestan especialmente las variedades altas. Éstas se desarrollan rápidamente formando una alegre valla para - por ejemplo - ocultar la pila de compost.
El clásico color amarillo hoy por hoy está ampliado a una gran gama, por ejemplo la variedad “Ruby eclilpse” (similar a la que puedes ver en la imagen que hemos tomado de flickr. com) presenta hermosas tonalidades rojizas que vale la pena explorar y tener en nuestro jardín.
Las variedades medianas o bajas, en un bancal de flores, harán buena compañía a las espuelas de caballero, a los asteres, a los flox, las amapolas plumosas y los soles de oro.
Al elegir el emplazamiento, ten en cuenta que los girasoles siempre girarán sus “caritas” hacia el sol… ¡no sea que por no tomar la precaución de pensar la orientación, siempre sólo puedas ver la su parte posterior en pleno día!
Las variedades enanas como “Pacino”, “Big smile” y “Teddybar” pueden ser también cultivadas en macetas, a condición de siempre ser regadas y abonadas abundantemente.
La elección es tuya: gigantes o enanos, en amarillo o en rojo, de maceta o de plena tierra … el surtido de girasoles es más extenso que nunca. No sólo en jardines rurales es una planta muy bien vista, aunque para estos casos se prestan especialmente las variedades altas. Éstas se desarrollan rápidamente formando una alegre valla para - por ejemplo - ocultar la pila de compost.
El clásico color amarillo hoy por hoy está ampliado a una gran gama, por ejemplo la variedad “Ruby eclilpse” (similar a la que puedes ver en la imagen que hemos tomado de flickr. com) presenta hermosas tonalidades rojizas que vale la pena explorar y tener en nuestro jardín.
Las variedades medianas o bajas, en un bancal de flores, harán buena compañía a las espuelas de caballero, a los asteres, a los flox, las amapolas plumosas y los soles de oro.
Al elegir el emplazamiento, ten en cuenta que los girasoles siempre girarán sus “caritas” hacia el sol… ¡no sea que por no tomar la precaución de pensar la orientación, siempre sólo puedas ver la su parte posterior en pleno día!
Las variedades enanas como “Pacino”, “Big smile” y “Teddybar” pueden ser también cultivadas en macetas, a condición de siempre ser regadas y abonadas abundantemente.