Se tiene por cierto que en 1889 el sha de Persia fue un huesped molesto. En el viaje que realizó a Londres, intentó comprar a la marquesa de londonderry. En esa misma visita, cuando estaba en un salón lleno de gente junto al Príncipe de Gales, le dijo que si las mujeres presentes eran sus esposas, era mejor que las hiciera decapitar y después comprara otras mas bonitas.