Los saltamontes rojo y azul reciben este nombre por la coloración interna de sus alas posteriores que es roja y azul, respectivamente. Estos saltamontes son prácticamente invisibles en reposo pues imitan perfectamente el ambiente circundante gracias al color grisáceo de sus libreas. Cuando se avecina un peligro realizan un salto, al tiempo que despliegan sus alas posteriores. El destello repentino de color logra desorientar al enemigo.