Su pelaje de color rojizo le da nombre a su especie y varía en función de la estación del año. En invierno, se cubre de un largo y abundante pelo que perderá previamente a los meses de calor. Su característica y voluminosa cola le ofrece equilibrio en sus acrobacias sobre las ramas de los árboles. Su alimentación básica son los frutos secos y las semillas, pero también complementan su dieta con huevos o setas. Presenta gran maestría en sus manos para conseguir los piñones, además de contar con un sentido de la vista muy bien desarrollado.