El nombre del
pueblo proviene de las tres grandes
fuentes que había en "Cesna": la del
Caño, la de la
Plaza y la de Enmedio.
Cesna fue reconquistada con anterioridad a la campaña de
Loja gracias a una cabalgada del Conde de
Cabra y Vizconde de
Iznájar y del alcaide de los donceles, tras la Batalla de Lucena, donde fue apresado el Rey Boabdil. En 1487 hubo enfrentamientos entre Loja e Iznájar por la posesión de "Xesna", que era rica en pastos por estar al lado del
río Pesquera. Según algunas informaciones, hacia el siglo XV existía un pueblo bastante grande denominado Cesna, que estaba habitado por árabes dedicados al
comercio de joyas.
Al igual que otros tantos
pueblos granadinos, Cesna estuvo siempre en el límite de la frontera, entre las tropas castellanas y musulmanas durante la Reconquista de
Granada.
De la
historia más reciente se puede decir que, en 1940, el antiguo pueblo, conocido ahora como las "Las Fuentes Viejas", quedó sepultado en parte a causa de un desprendimiento de
rocas propiciado por un gran temporal de
lluvia que causó la práctica destrucción del pueblo y numerosas víctimas.
En 1963 y como consecuencia de una segunda catástrofe similar a la de 1940, se puso en marcha un plan para la construcción de un nuevo pueblo en un lugar menos peligroso. La localización finalmente elegida fue La Hoya de las Viñas, en la parte delantera de la
Sierra del Alcornocal. Hacia 1966 se terminó la construcción del nuevo pueblo, con doscientas
casas, una
iglesia y una
escuela