Sin ánimo de polemizar con Estrella Roja, pero sí de exponer criterios.
Tal como expones en tu escrito sobre la similitud del capitalismo versos comunismo, no tengo más remedio que exponer mi opinión, ya que dicho como tú lo expones pudiera parecer que tienes razón y según yo estas muy equivocado.
No cabe duda que tu afirmación sobre el tema en cuestión está repleta de tecnicismos, como si buscaras encubrir con la literatura algo que no te atreves a llamar por su nombre, y no es más que nunca lo blanco es igual que lo negro. Así definiría yo tu criterio expuesto. Evidentemente, para afirmar lo que digo debo demostrarlo, y aunque estoy seguro que no coincidiremos, es posible que dos criterios dispares puedan compartir a través del ejemplo algún aspecto de lo que aquí decimos.
Dices tú.
El comunismo y el capitalismo no son más que la materialización ideológica de dos intereses cruzados y contrapuestos.
Digo yo.
Si no estuviera la lucha de clases por medio hablaríamos, pero estando este elemento de por medio, niego rotundamente que tu afirmación sea cierta, ni son iguales ni pueden serlo. Dos siglos de capitalismo salvaje, no pueden de ninguna manera compararse a 70 años de un proyecto de dignificación del ser humano que ha fracasado por los enormes recursos dedicados para que no triunfe. La opción llamada comunismo persigue y se fundamenta en la parte más dura de la lucha por el pan, la cultura y la libertad, lucha que ahora puede parecer lejana y antigua en esta parte del mundo donde vivimos los más afortunados. Este modelo desea conseguir y aplicar la relación y la fraternidad humana, cosa que tú niegas.
El capitalismo crea una sociedad que ni es justa, ni es libre en las naciones más ricas y que es trágica en las más empobrecidas, casi siempre por el saqueo y la explotación de los países realizado por grupos dominantes en el mundo y por sus propias y supuestas “clases dirigentes”.
Dices tú.
Tanto comunismo como capitalismo, dejan de lado tanto la propia naturaleza humana como la propia existencial.
Digo yo.
Para mi nada más lejos de la realidad tu afirmación, injusta por de mas, dado que no se puede decir lo que no se puede demostrar, mientras que un sistema necesita para su razón de ser la expoliación del suelo, subsuelo, mar y aire, dedicando ingentes recursos a terminar con este planeta. Este sistema está destruyendo el mundo, tanto en la relación social como en la biosfera, despreciando el medio y las personas, anulando el progreso de todo aquello que no les sirve para enriquecerse, el otro sistema, practica desde la educación la práctica del desarrollo sostenible, aborda la utilización racional de los recursos, enseña las pautas de vida, tiene claro que no se puede seguir escondiendo por más tiempo que la naturaleza está agotada e incapaz de reciclarse ante la agresión de que es objeto.
Las diferencias de estos dos modelos son para mí evidentes, se diferencian en todo, solo una persona con un claro lavado de cerebro puede afirmar lo contrario.
Así lo siento y así lo digo. No deseo tener razón, esta es la mía y por eso la expongo.
SEGURAMENTE SEGUIMOS HABIENDO IGNORANTES.
Tal como expones en tu escrito sobre la similitud del capitalismo versos comunismo, no tengo más remedio que exponer mi opinión, ya que dicho como tú lo expones pudiera parecer que tienes razón y según yo estas muy equivocado.
No cabe duda que tu afirmación sobre el tema en cuestión está repleta de tecnicismos, como si buscaras encubrir con la literatura algo que no te atreves a llamar por su nombre, y no es más que nunca lo blanco es igual que lo negro. Así definiría yo tu criterio expuesto. Evidentemente, para afirmar lo que digo debo demostrarlo, y aunque estoy seguro que no coincidiremos, es posible que dos criterios dispares puedan compartir a través del ejemplo algún aspecto de lo que aquí decimos.
Dices tú.
El comunismo y el capitalismo no son más que la materialización ideológica de dos intereses cruzados y contrapuestos.
Digo yo.
Si no estuviera la lucha de clases por medio hablaríamos, pero estando este elemento de por medio, niego rotundamente que tu afirmación sea cierta, ni son iguales ni pueden serlo. Dos siglos de capitalismo salvaje, no pueden de ninguna manera compararse a 70 años de un proyecto de dignificación del ser humano que ha fracasado por los enormes recursos dedicados para que no triunfe. La opción llamada comunismo persigue y se fundamenta en la parte más dura de la lucha por el pan, la cultura y la libertad, lucha que ahora puede parecer lejana y antigua en esta parte del mundo donde vivimos los más afortunados. Este modelo desea conseguir y aplicar la relación y la fraternidad humana, cosa que tú niegas.
El capitalismo crea una sociedad que ni es justa, ni es libre en las naciones más ricas y que es trágica en las más empobrecidas, casi siempre por el saqueo y la explotación de los países realizado por grupos dominantes en el mundo y por sus propias y supuestas “clases dirigentes”.
Dices tú.
Tanto comunismo como capitalismo, dejan de lado tanto la propia naturaleza humana como la propia existencial.
Digo yo.
Para mi nada más lejos de la realidad tu afirmación, injusta por de mas, dado que no se puede decir lo que no se puede demostrar, mientras que un sistema necesita para su razón de ser la expoliación del suelo, subsuelo, mar y aire, dedicando ingentes recursos a terminar con este planeta. Este sistema está destruyendo el mundo, tanto en la relación social como en la biosfera, despreciando el medio y las personas, anulando el progreso de todo aquello que no les sirve para enriquecerse, el otro sistema, practica desde la educación la práctica del desarrollo sostenible, aborda la utilización racional de los recursos, enseña las pautas de vida, tiene claro que no se puede seguir escondiendo por más tiempo que la naturaleza está agotada e incapaz de reciclarse ante la agresión de que es objeto.
Las diferencias de estos dos modelos son para mí evidentes, se diferencian en todo, solo una persona con un claro lavado de cerebro puede afirmar lo contrario.
Así lo siento y así lo digo. No deseo tener razón, esta es la mía y por eso la expongo.
SEGURAMENTE SEGUIMOS HABIENDO IGNORANTES.