Dicen que para combatir el calor la mejor bebida es el agua, por eso cuando me voy a dormir, siempre dejo dos vasos de agua en la mesilla de noche, uno lleno y el otro vacio. El vaso lleno es por si me despierto de noche y tengo sed, y el vacio, por si me levanto de noche y no tengo sed. Como gran amante a todos los objetos antiguos, a esta mesita le tengo aún más cariño, hace casi 70 años que está en casa, a pesar de haber sido una casa con muchos niños (7) es curioso que todavia conserve el espejo y la vasija de cristal cos sus florecillas pintadas, su plato y vaso incorporado para tomar el agua por la noche.
Hasta antes del Siglo XVIII, se utilizaba habitualmente una silla tapizada a juego con la Colcha; como se puede ver tiene una puertecita abajo, que se utilizaba para guardar...