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LIMONES: LADRONES DE GUANTE BLANCO.- Sí, son ladrones y a eso...

Han tenido que pasar cerca de 70 años para llegar a este médio de transporte tan cómodo, en aquellos tiempos el transporte al Molino de la aceituna se hacía con mulos, cargando dos capachas cada uno, las capachas eran una especie de sacos que se hacian con pleita de esparto y que una vez llenos podian pesar sobre 50 kilos cada uno, después vinieron los sacos de yute que nos venian y aprovechabamos del Nitrato de Chile o Noruega, eran más faciles de manejar que las Capachas.
Es cierto que el campo ha experimentado una increible transformación que los agricultores de entonces no podian imaginar.
Hablando de avances, también hemos avanzado en pasar de indignados en este último trienio, a cabreados y nuestras razones tenemos, no es justo que se esté pagando a 0´30 €uros un kilo de Aceituna, el mismo precio que tenía hace 30 años atrás.
No hay que ser muy listos ni muy inteligentes, para no darse cuenta de que algo y muy grave está ocurrriendo, o va a ocurrir y las no deseadas consecuencias, todos las vamos a lamentar, no es justo ni razonable que por un remolque de aceituna como el de la foto nos paguen unos 1.500.-€uros, hasta poner la aceituna aquí nos cuesta mucho esfuerzo y sobretodo mucho dinero, no cubrimos gastos, si no hay un aumento del precio creo que tendremos que abandonar este único cultivo, y como no tenemos otra cosa, vamos a pasar más hambre que, el perro de un Afilaor, que se comia las chispas por comer algo caliente.

LADRONES DE GUANTE BLANCO.- Sí, son ladrones y a eso le llaman ellos "libre mercado, o la ley de la oferta y la demanda" bueno pués para mi son unos traga-ollas.
Desayunando esta mañana con un camionero de Almería, me cuenta que hace un par de años, un vecino de su pueblo agricultor, indignado con los precios de sus productos se propuso investigar el recorrido de tres palés de Tomates que el vendió a 0´60 €uros en su finca, los cargaron y siguió con su coche al camión que los transportaba y que esa misma tarde descargó en Madrid, cuando al dia siguiente abrieron las puertas del mercado, no perdió de vista a sus tomates, fueron repartidos a dos o tres comerciantes minoritários y fué tal el cabreo que cojió, cuando pudo comprobar que sus tomates los vendian a 2,40 €uros el kilo, ¡Y que no se pueda hacer nada ante semejante atropello! esto no es para cabrearse, es para liarse a bofetadas, no son sólo los Tomates lo mismo está pasando con todos los productos del Campo, esta situación no puede continuar así, tiene que reventar por donde sea y no va a tardar mucho tiempo.