Hoy con las alturas nevadas el fuerte viento y el agua-nieve que nos está cayendo hace un frio que pela.
Cada uno de nosotros tenemos diferentes formas de combatir el frio, porque cada organismo puede sentirlo de distinta manera.
Sin embargo, encogerse en la cama cuando tenemos frio es uno de los más habituales y extendidos, un gesto de tipo instintivo que, además, compartimos con el resto de los animales.
La explicación de que adoptemos esa postura es que, al hacerlo, disminuimos el área superficial del cuerpo que emite calor al espacio que hay entre nosotros y las sábanas; y, por tanto, se amortigua considerablemente el enfriamiento que sufre el organismo. La sensación inmediata es que nos sentimos más abrigados.
Cada uno de nosotros tenemos diferentes formas de combatir el frio, porque cada organismo puede sentirlo de distinta manera.
Sin embargo, encogerse en la cama cuando tenemos frio es uno de los más habituales y extendidos, un gesto de tipo instintivo que, además, compartimos con el resto de los animales.
La explicación de que adoptemos esa postura es que, al hacerlo, disminuimos el área superficial del cuerpo que emite calor al espacio que hay entre nosotros y las sábanas; y, por tanto, se amortigua considerablemente el enfriamiento que sufre el organismo. La sensación inmediata es que nos sentimos más abrigados.