A este limonero dormidito y arropaito, ahora que no nos ve, sí que podemos tirarle de la Manta; La expresión "tirar de la manta", que implica descubrir algún asunto secreto, tiene su origen en unos grandes lienzos llamados "Mantas", que se colocaban en muchas iglesias de Navarra a finales del Siglo XVIII y en los que constaban los nombres de las familias que descendían de judios conversos. "Tirando" de ella, se revelaban "oscuros" pasados.
Refranillo: Mañanitas de niebla, tardes de Sol; en Otoño que poquita calor.
Refranillo: Mañanitas de niebla, tardes de Sol; en Otoño que poquita calor.