Habia en Limones un mozo que se buscó su novia en un Cortijo cercano, una noche de crudo invierno fué a verla y era de las primeras veces que entraba a la casa y no la conocia muy bién, cuando sobre las 12 de la noche se disponía a venirse se despidió diciendo; hasta otro dia y que tengan buenas noches, pero en vez de salir por la puerta que daba a la calle, se metió en otra puerta que habia a la izquierda y que era la de la Despensa, el suegro que pensó que ya estaba en la calle, le preguntó ¿Como está la noche? y el futuro yerno le contesta ¡Está muy oscuro y uele a queso! esto pasaba por culpa del candíl que su iluminación era tan pobre, que el menda no acertó con la puerta de la calle.