CANCIONCILLA DE SEGADORES.
Vale mas un labrador
aunque se llene de tierra
que doscientos oficiales,
aunque se vistan de seda.
Todos los enamorados
se enamoran en el baile,
yo me enamoré de tí
yendo por agua una tarde.
Yo se lo pedí a mi novia
cuando venía de lavar
Y la puñetera dijo:
¡Fresco lo quieres pillar!
Vale mas un labrador
aunque se llene de tierra
que doscientos oficiales,
aunque se vistan de seda.
Todos los enamorados
se enamoran en el baile,
yo me enamoré de tí
yendo por agua una tarde.
Yo se lo pedí a mi novia
cuando venía de lavar
Y la puñetera dijo:
¡Fresco lo quieres pillar!