Ya falta menos para la
Dragon, dicen que este año caerá un bombardeo, pero de los buenos, y más de uno se perderá por esos
ríos y esos bancales. Que ganas de vernos a todos perdidos entre las caravanas, con el olorcillo a hippy y la
música bum, bum, bum... Son unos días entrañables para pasar en compañia de la
familia reunidos alrededor de una lumbre comiendo
comidas gringas con extracto de rasta hippy, mmmh se me hace la boca
agua.