Yo estoy viviendo aquí porque me casé con uno de
Murchas, pero en realidad no soy de este
pueblo. Cuando llegue a Murchas me pareció un pueblo muy acogedor con gente muy amable. En aquel tiempo (en el año 60) el pueblo tenia las
calle como ahora solo que en vez de alquitran había
piedras. El pueblo era algo más pequeño. La
iglesia no era como se ve ahora, antes el
retablo era de madera pintada en
color oro y la decoración era distinta. Tambien tenía un
púlpito, pero la reformaron y lo quitaron todo.
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