El hallazgo de hachas y otros restos de la Edad del Bronce permiten asegurar que en este lugar hubo asentamientos humanos desde el Neolítico, hacia el 9000 a. C. Durante el periodo nazarí perteneció a la tahá de Sahil –
Mecina Tedel era entonces una alquería- y tras la conquista por los Reyes Católicos en el siglo XV sufrió la presión cristiana que terminó en un levantamiento general de los moriscos bajo el caudillaje de Abén Humeya. La expulsión con la que terminó la revuelta provocó un despoblamiento que se solventó con la llegada de colonos desde
Galicia,
León,
Asturias y Castilla. Durante el siglo XIX despertó en esta localidad una floreciente industria de vinos y sedas.
El topónimo
MURTAS deriva del vocablo latino myrtus (mirto o arrayán). La murta:
fruta o baya del mirto. Género de plantas mirtáceas aromáticas, forma arbustos con
flores en corimbos cortos o aisladas, tiene ramas cuadrangulares y pubescentes, pétalos blancos y baya negro-azulada, comprende más de 60 especies, siendo común en la
flora mediterránea. El término aparece consignado en escritores árabes: murta, marta murtas. El vocablo MURTAS haciendo referencia al municipio se documenta por primera vez en 1501 en la bula de erección de las
parroquias de
Granada: " Mulras (Murtas), Atrara et
Turón..."
Hasta época relativamente reciente el lugar estaba estructurado en tres municipios que correspondían con los actuales núcleos de población, pasando a su unificación el 24 de julio de 1929.