Darlac y el sauce llorón.
Aquella
noche, tenía algo de misterio, la luna de plata se derramaba sobre el bosque, dejando un
sendero luminoso, una estela que daba fin a los pies del gran sauce, en cuyo interior albergaba la entrada a la morada de Darlac, un viejo mago muy poderoso, que dominaba las ciencias ocultas.
Conocedor de secretos, sortilegios, maleficios y hechizos.
Quiso el destino, que la hija recién nacida del rey fuese abandonada a su suerte, cuando su ama intentando salvarla de una
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