Recuerda, algunas cosas tienen que terminar para que empiecen cosas nuevas. El valor de la vida está en entender que tu familia no tiene precio, que tu salud es la verdadera riqueza y que tu tiempo vale oro. El tiempo es relativo, su único valor es dado por lo que hacemos mientras está pasando. No siempre tenemos la oportunidad de cambiar las cosas que la vida nos pone por delante, pero sí podemos elegir cómo tratarlas y cómo nos afectan. La gente nunca está contenta: si haces el bien te envidian, si haces daño te critican, si haces lo que te apetece, te juzgan.
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