No hay tiempo perdido. Cada tiempo lo hemos dedicado a lo que creímos. Y bien o mal, nos enseñó algo. Para quien sabe esperar siempre hay una llegada maravillosa, las cosas buenas tienen el paso lento. Los que emplean mal su tiempo son los primeros en quejarse de su brevedad. Hoy os traigo la bella historia de la gata del Titanic que previó el hundimiento y recuperó a sus bebés antes de que el barco zarpara.
La gata "Jenny" era la mascota del Titanic y la subieron a bordo para ayudar a combatir los roedores.
Vivía en la cocina del barco y estaba a cargo de un trabajador llamado Jim Mulholland.
Durante las pruebas en el mar, Jenny dio a luz a gatitos y Jim les encontró un lugar cómodo junto a la cocina del barco.
El cuidado de la madre gata y sus gatitos rompió la... Somos lugares de paso, la gente entra y sale de nuestras vidas; alguien toma algo, alguien deja algo, alguien desaparece, alguien vuelve.