Si tú me recuerdas, no me importará que el resto del mundo me olvide. El tiempo es como un río, nunca podrás tocar sus aguas dos veces, porque el agua que ya pasó nunca pasará de nuevo. El sol no espera a que se le suplique para derramar su luz y su calor. Imítalo y haz todo el bien que puedas sin esperar a que se te implore. El mal existe, pero no sin el bien, como la sombra existe, pero no sin la luz. Algunas personas son amables sólo porque no se atreven a ser de otra forma.