No hay ninguna cosa seria que no pueda decirse con una sonrisa. Para que sea un hermoso día, hay que despertar con la convicción de que será un día estupendo. Si no es correcto, no lo hagas. Si no es verdad, no lo digas. ¿CUÁNDO CONSEGUIRÉ SER FELIZ? –preguntó la Mujer Insatisfecha a la más Anciana del Valle.
–CUANDO TE CANSES –la respondió esta sin pensárselo,
mientras continuaba arando su huerto.
La mujer la miró muy sorprendida,
sin comprender sus palabras.
–Cuando te canses de preocuparte por el mañana,
cuando te canses de compararte con otros
–prosiguió la anciana sonriéndole con
simpatía–. Cuando te canses
de recordar lo que pasó, lo que se fue de tu vida y lo que pudo haber sido. ... Dos cosas contribuyen a avanzar: ir más deprisa que los otros o ir por el buen camino.