Carecer de algunas de las cosas que uno desea es condición indispensable de la felicidad. Esperando a quien nunca llegará, ignoramos a quien nos espera desde siempre. No hay ningún camino que no se acabe, como no se le oponga la pereza y la ociosidad. Cuando mejor es uno, tanto más difícilmente llega a sospechar de la maldad de los otros.. Hola Pepi, espero que estes bien un saludo para tu marido y tu hija,,"Que buenas vistas tienes,,,,