Casi con toda seguridad la dureza de la climatología, y muy especialmente, la de las condiciones de vida, ha podido ser un elemento estimulador de la agudeza y como no de la capacidad de resistencia, de los pedromartineros a la hora de hacer frente a las dificultades de la vida.
Por que hoy tal vez no, pero hace 50 años, dudo que hubiera o haya lugares donde las condiciones de vida y de trabajo fueran mes duras de lo que lo fueron en Pedro Martinez, eso de hasta el agua para beber y lavarse tener que ir a buscarla a varios cientos de metros del domicilio, era algo bien difícil de asimilar, y no digamos el trabajo de los jornaleros del campo, con aquellos sueldos de autentica miseria, y la represión, moral, política, física, económica, intelectual, a veces pienso que estábamos vivos físicamente pero mentalmente asesinados, la vida era de autentica crueldad, quizá no para todos los habitantes, pero si para un numero muy alto de criaturas, seguramente la gran mayoría, aun recuerdo que de niño me llamaba poderosamente la atención y observaba con una gran curiosidad, extrañeza, asombro y como no, tristeza, como por las calles y caminos circulaban criaturas con la mirada triste y perdida, como sin esperanza, sin ilusión, sin alelaría, era un paisaje tétrico, si tuviera que describirlo con un dibujo, este seria sin color, solo en blanco y negro y con los rasgos duros.
Pero bueno hoy día afortunadamente las cosas han cambiado mucho y siguen cambiando, a pesar de algunos (afortunadamente caza vez menos ) las cosas mejoran día a día para los que aun quedáis en el pueblo, que ilusión poder observar que ahora se vive infinitamente mejor que antes, que la gente sabe sonreír y ser feliz.
Y como dice el paisano José Gomes, en su comentario, explicar ahora algunas de aquellas duras vivencias, cuando apenas han pasado cincuenta años, perecen historias inventadas y en consecuencia increíbles.
Saludos paisanos (de dentro y de fuera) y bien venida de nuevo (tras ese periodo de ausencia) la pagina que nos permite comunicarnos a aquellos que emigramos y a los que decidisteis quedaros.
Dokamo.
Por que hoy tal vez no, pero hace 50 años, dudo que hubiera o haya lugares donde las condiciones de vida y de trabajo fueran mes duras de lo que lo fueron en Pedro Martinez, eso de hasta el agua para beber y lavarse tener que ir a buscarla a varios cientos de metros del domicilio, era algo bien difícil de asimilar, y no digamos el trabajo de los jornaleros del campo, con aquellos sueldos de autentica miseria, y la represión, moral, política, física, económica, intelectual, a veces pienso que estábamos vivos físicamente pero mentalmente asesinados, la vida era de autentica crueldad, quizá no para todos los habitantes, pero si para un numero muy alto de criaturas, seguramente la gran mayoría, aun recuerdo que de niño me llamaba poderosamente la atención y observaba con una gran curiosidad, extrañeza, asombro y como no, tristeza, como por las calles y caminos circulaban criaturas con la mirada triste y perdida, como sin esperanza, sin ilusión, sin alelaría, era un paisaje tétrico, si tuviera que describirlo con un dibujo, este seria sin color, solo en blanco y negro y con los rasgos duros.
Pero bueno hoy día afortunadamente las cosas han cambiado mucho y siguen cambiando, a pesar de algunos (afortunadamente caza vez menos ) las cosas mejoran día a día para los que aun quedáis en el pueblo, que ilusión poder observar que ahora se vive infinitamente mejor que antes, que la gente sabe sonreír y ser feliz.
Y como dice el paisano José Gomes, en su comentario, explicar ahora algunas de aquellas duras vivencias, cuando apenas han pasado cincuenta años, perecen historias inventadas y en consecuencia increíbles.
Saludos paisanos (de dentro y de fuera) y bien venida de nuevo (tras ese periodo de ausencia) la pagina que nos permite comunicarnos a aquellos que emigramos y a los que decidisteis quedaros.
Dokamo.